El 10 de marzo se cumplieron cien años de su nacimiento en la Ciudad de Buenos Aires, más precisamente en el emblemático barrio de La Boca.
A los 90 años falleció, luego de sobresalir como líder natural de género, como geógrafa esclarecida y como educadora apasionada.
Durante cincuenta años ocupó el sitial Félix de Azara de esta academia, con una dedicación singular. Se desempeñó en diferentes cargos del Consejo Directivo y presidió la corporación desde el año 2003 hasta el 2006, en coincidencia con las bodas de oro institucionales.